Doce meses atrás mis vacaciones en Argentina estaban terminando. Veinte días, algunos miles de kilómetros recorridos, familia, amigos, lugares, mil quinientas fotos, navidad, calor, asados. Después pasaron doce meses que en muchos aspectos y pese al contexto recesivo fueron de crecimiento profesional y aprendizaje (excusas, excusas) y que podrían explicar este curioso retraso en postear. Pero aquí estamos.
Toronto > Buenos Aires > Tucumán > Buenos Aires > Calafate > Chaltén > Buenos Aires.
Norte
Nunca había tenido la suerte de visitar de visitar la provincia de Tucumán, y este (aquél) viaje le dediqué algunos días. Paisajes verdes y selva/yunga.
Centro
Buenos Aires. Querido.
Sur
Lo más lindo del viaje. Con mis hermanos en los senderos de Chaltén. Navegando en los lagos y caminando en el glaciar. Resumen: about as good as it gets.
(recordé: el señor de los anillos)
Todas Las Fotos
Nuevo año y nuevo update, la galería de fotos permite ver las fotos en modo «3D» (escépticos: sigan leyendo) y es algo para ver al menos una vez. Al seguir el link a la colección de fotos (y luego de hacer click en el icono «Play» (presentación de diapositivas), posiblemente vean el link («View this in 3D») que hace falta seguir.
Tradicional o 3D, recomiendo: las fotos panorámicas, hay varias, desde Ruinas Quilmes hasta las del Perito Moreno. Como siempre, gentileza de Hugin, retoques via Krita y Digikam.
Aquí van: selección de las fotos del viaje, diapositivas: Argentina 2008/09.
Palabras
La Argentina (Norte, Sur, Buenos Aires) que yo ví y disfruté en el viaje, ya no es la Argentina que viven sus habitantes. Es más bien la imagen que yo extraño. Mis impresiones, entonces, tienen poco valor – o al menos, es esa mi impresión. :)
Al fin! Las fotos, preciosas… la del Torre y el Fitz juntos es una figurita bien difícil, eso lo sé. Las palabras, interesantes, pero me hubiera gustado leerte más. Seguramente fue movilizador pero el paso del tiempo habrá asentado emociones y te dejará explayar más conclusiones.
MaxD siempre dando en la tecla :) Supongo que será que uno empieza a creer ver que demasiado poca cosa cambió y se enfoca más en la flia, los amigos, los lugares. En el fondo miles de cosas habrán cambiado y sin embargo es como que no se ven, por algún motivo. Movilizador sin duda pero quizás no en el sentido que quizás yo me había imaginado. Tendré que pensar un poco más :)
Probablemente te pase algo parecido a lo que me pasa a mí cuando paso por BAires, pero más exagerado por la proporción de la distancia y el tiempo: lo ves con cierta «ajenidad», casi tan naturalmente como en su momento lo viviste como «propio». Raro escenario donde estás de visitante pero con los tuyos que están de local, un anclaje que te impide la mirada del turista puro, y sin embargo nada de todo esto es tuyo, no es más así.